El origen de las corporaciones bíblicas aparece constatado en los antiguos libros de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, en torno al año 1664, mencionándose la de Los Evangelistas, Los Apóstoles, Los Jetones, Alegorías de la Fe y la Religión, todas ellas formando parte del tronco común de esta Cofradía.
Otros pueblos poseyeron esta manifestación de la religiosidad popular, pero fue erradicada por los Decretos de los Obispos ilustrados del siglo XVIII y acabaron desapareciendo. No fue así el caso de Puente Genil, que no perdió esta seña de identidad a pesar de las advertencias de excomunión sobre este asunto.
Será en el último tercio del siglo XIX cuando estas agrupaciones de figuras se independicen dela Cofradía matriz y se funden las “corporaciones” tal y como las conocemos actualmente, tomando su denominación de los personajes o pasajes bíblicos que representan y desfilando intercaladas entre las cofradías penitenciales que se procesionan.
En esencia, las corporaciones son asociaciones o agrupaciones de varones, llamados entre sí hermanos, regidas por unos estatutos, que poseen un lugar común, denominado “cuartel” (del que hablaremos más adelante) y que tienen como fin primordial contribuir al esplendor de la Semana Santa de Puente Genil.
A partir del Miércoles Santo, las “figuras bíblicas” invaden las calles de la Puente acompañando a las procesiones. Éstas representan a personajes bíblicos del Antiguo y Nuevo Testamento, junto a otros que simbolizan aspectos la teología cristiana.
Estos personajes desfilan con “rostrillos” y otros signos que hacen que puedan ser reconocidos, los llamados “martirios” porque muchos de ellos llevan aquellos objetos con los que fueron martirizados.
Y, entre todas las corporaciones, la del Imperio Romano es la más importante, ya que simboliza el poderío histórico de Roma en la Judea de Jesús, y pasea sus estandartes por las calles de Puente Genil, dominando las procesiones a partir del Jueves Santo. Todos van ataviados con vistosos y lujosos trajes de varios colores bordados de pedrería y oro.
Esta corporación, esta formada por cinco escuadras, compuestas cada una por doce romanos, bandera, estandarte, un capitán, jefes y oficiales. Realizan una correcta formación acompañada, además, por una escuadra de música. Su origen data de 1871.
El cuartel
Todas las Corporaciones tienen su Cuartel. Este es el “alojamiento” del manantero durante la Semana Santa, y su lugar de reunión habitual con sus hermanos a lo largo el año. La razón de su nombre es variada:
puede provenir dela denominación que se daba hace cientos de años a los distintos barrios o distritos de las ciudades o puede provenir de la traducción militar latina, bajo el punto de vista de que sólo es para los hombres.
El origen se remonta al año 1721, donde, según un documento, los hermanos ya hacían sus comidas de hermandad, a veces dentro de los mismos templos, cosa que prohibieron posteriormente los obispos.
En los primeros tiempos no tenían las corporaciones sede fija. En Cuaresma y Semana santa solían utilizar molinos o graneros como locales de encuentro, teniendo un carácter itinerante. Indicador de las vicisitudes por las que pasó Puente Genil durante el siglo XX, hoy, la mayor parte de las Corporaciones poseen una sede fija.
Todos los cuarteles, bien sean casas antiguas rehabilitadas o de nueva construcción, poseen una estructura tipo, con una serie de dependencias esenciales: amplio vestíbulo o sala de recepción, gran salón comedor, cocina, despensa, aseos y, si el edificio lo permite, patio.
Es en torno a ese gran salón donde se desarrolla la vida en el cuartel. Una larga mesa con un número de sillas equivalente al de hermanos que componen la corporación. Se decoran sus paredes con multitud de testimonios gráficos, verdadero archivo manantero de presentes y ausentes, la Vieja Cuaresmera, poesías, caricaturas…
Verdadero patrimonio de Puente Genil, el Cuartel constituye el eje central de la Mananta, su motor y espíritu. En él es encuentra gran parte de la singularidad dela Semana Santa, ya se aborde desde el punto de vista antropológico, religioso o cultural.
Fuentes: Ayuntamiento de Puente Genil, Turismo de Puente Genil, Caminos de Pasión y Ruta Bética Romana.